Tras los pasos de Trump, Milei lanzó críticas a la ONU y elogió política migratoria de EEUU

El de Trump es un liderazgo que busca revertir tendencias que podrían llevar a “una catástrofe global”, según Milei.
En su discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas, el presidente de Argentina, Javier Milei, recordó que el año pasado había planteado un cambio en la política exterior argentina basado en “el retorno a las ideas de la libertad” y sostuvo que la ONU se apartó de sus principios fundacionales.
Según explicó, el organismo pasó de ser un espacio de mediación entre Estados a transformarse en “una organización que pretende decidir no solo qué debe hacer cada Estado nación, sino también cada uno de los individuos en las distintas latitudes del planeta”.
El mandatario aseguró que Argentina no acompañará políticas que impliquen “el cercenamiento de libertades individuales, comerciales ni la violación de los derechos naturales”. Y advirtió que “es preferible decir una verdad incómoda que una mentira confortable”.
Elogios a Estados Unidos
El mandatario también mencionó al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como ejemplo de un liderazgo que, según dijo, busca revertir tendencias que podrían llevar a “una catástrofe global”. “Y sabemos que una catástrofe en Estados Unidos es una catástrofe global”, añadió, al tiempo que resaltó “su férrea y exitosa política en términos de ponerle un freno a la inmigración ilegal”.
Este martes, tras una reunión entre Trump y Milei, el estadounidense manifestó que el presidente argentino tiene su “respaldo completo y total para su reelección”.
“El muy respetado presidente de Argentina, Javier Milei, ha demostrado ser un líder verdaderamente fantástico y poderoso para el gran pueblo de Argentina, avanzando en todos los niveles a una velocidad récord”, escribió Trump en la red Truth Social.
Los cuatro “principios” que le sugirió a la ONU
Milei propuso que Naciones Unidas adopte una agenda basada en cuatro principios que, a su juicio, permitirían recuperar el espíritu original del organismo. En primer lugar, habló del principio del “mandato esencial”, y señaló que la misión central de la ONU debe ser preservar la paz y la seguridad, mientras que el resto de las funciones deben entenderse como complementarias. “La gestión estratégica y los recursos de esta institución requiere, por lo tanto, apegarse a esas prioridades, no a otras”, dijo.
El segundo fue el “principio de subsidiariedad internacional”, que implica que la ONU solo debería intervenir en aquellos casos que superen la capacidad de los Estados. “En todos los demás casos corresponde devolver la iniciativa a los Estados, que son quienes poseen legitimidad democrática y responden ante sus pueblos”, manifestó.
En tercer lugar, propuso un principio de “eficiencia institucional”. “Así como la Argentina ha iniciado un proceso de optimización del Estado, eliminando estructuras redundantes y devolviendo recursos a los contribuyentes, entendemos que la ONU necesita un camino similar”, ahondó y sugirió la realización de “auditorías confiables, el cierre de programas ineficaces, la consolidación de agencias únicas y un financiamiento condicionado a resultados verificables”.
También se refirió al principio de “simplificación normativa”, para “evitar que la cooperación internacional se convierta en un obstáculo al desarrollo económico y la generación de oportunidades”.
En otro tramo, sostuvo que existe una “escalada inadmisible en la violencia política por parte de la izquierda a nivel global” y que es una violencia que en Argentina conocen “muy bien”. “Es inadmisible recurrir a la fuerza allí donde las razones fallan. Por eso repudiamos enfáticamente estos procedimientos que atentan contra las normas básicas de convivencia democrática”, dijo.
En la parte final de su intervención, Milei reafirmó el reclamo argentino por las islas Malvinas y exhortó al Reino Unido a retomar las negociaciones.