Ante la utilización permanente de la mentira, la difamación y la descalificación como prácticas políticas permanentes por parte de algunos dirigentes y figuras de la derecha, “la izquierda tiene que defender la política como una herramienta para defender a los más débiles” y al mismo tiempo “no caer en las provocaciones”, señaló el senador frenteamplista José Carlos Mahía en INFO 24.
Mahía puntualizó que dichas prácticas “son herramientas, no son casualidades; el estilo ese de descalificar, de mentir, de insultar al otro directamente, de tratar de dañar a personas y no debatir ideas, de hacer de eso una herramienta política, es parte de la acción de las derechas y es parte de las cosas que la izquierda tiene que saber enfrentar con inteligencia, y con la historia de la propia izquierda”.
En ese sentido “la izquierda tiene que defender la política como una herramienta para defender a los más débiles, a las personas más vulneradas, a las personas que más necesitan de un gobierno honesto y transformador”, indicó el legislador del seregnismo.
El apego a esa orientación histórica requiere también “no caer en las provocaciones -porque a veces se hacen- y no perder de vista eso, que la degradación de la política es funcional a la derecha, que el discurso de ‘son todos iguales’ hace a que la gente se resigne y por lo tanto piense que votar a alguien con compromiso de ideas valga lo mismo que no hacer absolutamente nada y hacer puro marketing”.
El entrevistado destacó que “defender la esencia de la calidad de la política es una de las batallas más importantes que tenemos y está por encima de lo electoral; el dignificar, el aportar calidad, el aportar valores, y el no entrar en provocaciones, sin dejar de defender y de hacer respetar a la izquierda y a las personas en general, que merecen una calidad democrática que esté a la altura que tiene la gente en el país y sobre todo de la perspectiva del Uruguay”.
Sin ser exactamente lo mismo, el reclamo insistente del candidato presidencial blanco, Álvaro Delgado, al Frente Amplio (FA), para que anuncie quiénes integrarían su equipo económico en caso de llegar al gobierno nuevamente, expresa “especulaciones de una fórmula que políticamente es muy débil”, explicó el legislador.
“La fórmula de Delgado y (Valeria) Ripoll ha significado un dolor de cabeza porque no la aceptan ni buena parte de los blancos, no entienden cómo se llegó a esa formulación; y el problema que tienen es que hacen toda la campaña en torno al FA y no a las ideas o a la defensa de su propio gobierno, asumen que es difícil de defender”.
“Todo el día se pasan hablando del FA, van a tener una derrota muy clara porque el FA, a la larga o a la corta, es el partido que en el Uruguay marca la agenda política”, anticipó el senador Mahía.
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