Tenenbaum sobre el narcotráfico: "No instalamos la mirada en quienes realmente mueven el mercado"

“El que está lavando los activos que genera la renta criminal no aparece, no se ve, pero está ahí”, resaltó el sociólogo.
El sociólogo Gabriel Tenenbaum analizó en Nada que perder algunos aspectos del combate al narcotráfico y el crimen organizado en Uruguay, que a su entender evidencia un marcado y desigual nivel de persecución a los diferentes actores que participan en la cadena del mercado ilegal de drogas. “El que está lavando los activos que genera la renta criminal no aparece, pero está ahí”, afirmó.
En su análisis, Tenenbaum consideró que Uruguay “se ha acostumbrado” a entender, en especial desde la izquierda, que con una “política estructural universal” se soluciona el problema de la criminalidad. “No es así”, subrayó. No obstante, dijo que en el país “está un poco superada” la idea de que con “determinada política social” sobre la pobreza se van a “mitigar los temas de criminalidad”.
En este contexto, el sociólogo observó críticamente el hecho de que se haga foco en algunos barrios muy concretos que tienen “graves privaciones de derechos”, así como en algunos sujetos “que son generalmente los débiles del poder”, en la cadena que permite el funcionamiento del mercado de drogas. “No instalamos la mirada en quienes realmente mueven el mercado”, expresó.
Asimismo, apuntó que el “gran presupuesto” del Estado se dirige a la represión o a la privación de libertad, y no a las políticas preventivas. “Hay que admitir que hay un conjunto de medidas en materia preventiva que tiene efectos relativos”, explicó, y ligó esa reflexión con aquellos “nudos difíciles de desatar” relativos a causas sociales, como las que se registran en la zona oeste de Montevideo.
Explicó que estos barrios atravesaron un proceso de desestructuración comunitaria en la década de 1970, fueron golpeados en dictadura, y más adelante fueron testigos del ingreso de sustancias psicoactivas, primero a baja escala. “Hay tres generaciones vinculadas de alguna u otra manera con el mercado de las drogas ilegalizadas”, detalló, recordando que en esa época, años 70 y 80, comienza una “intensificación” internacional de este mercado ilegalizado. “Montevideo es clave y le dimos la espalda”, reflexionó.
Estos grupos “no son los que mueven el mercado”, añadió el entrevistado, “pero son los expuestos, los que ponen la cara”, dijo en referencia a su presencia diaria en los medios de comunicación. “A medida que más poder de decisión tenés en el mercado, menos expuesto estás”, explicó. Y en esa dirección agregó: “El que está lavando los activos que genera la renta criminal no aparece, no se ve, pero está ahí”.
Existen algunos casos de “movilidad social ascendente”, como el del narcotraficante Luis Fernández Albín, quien la última vez que fue detenido vivía en un barrio privado de Canelones, puntualizó Tenenbaum, pero recordó que hay otros sujetos que provienen de clases media o alta que “brindan soporte”.
Porque "para mover el negocio" se requiere logística y “lavar el dinero”, agregó, al tiempo que sostuvo que hay profesionales “que permiten ese tipo de trabajo”. “De eso no estamos hablando”, remarcó, y apuntó que “todo está diseñado para perseguir de manera desigual y castigar de manera desigual los delitos”.