“Podemos tener una actitud que sea preguntarnos ‘¿qué futuro tengo, voy a perder mi trabajo, qué será de mi familia?’, y es razonable”. Pero Carolina Cosse propuso que el país reflexione en qué lugar quiere estar en los próximos años. “Este es el año en que Uruguay define su futuro”, estableció la precandidata.
El Frente Amplio abrió una nueva etapa histórica del país, pero ahora estamos atravesando una nueva era en el mundo. “Por lo tanto es necesario que el Frente Amplio abra esa nueva era en el Uruguay”, ante lo cual “no nos tenemos que resignar”, dijo Cosse en su discurso.
Con dos tercios de los trabajos a punto de cambiar y el restante tercio rumbo a destruirse, la preocupación existe en el mundo ante el cambio de era, impredecible. Los razonamientos del siglo XX ya no son apropiados, pero Cosse enfatizó que el futuro no está escrito y es por eso que los uruguayos podemos preparar al país ante los cambios vertiginosos y recurrir a algo permanente: “nuestra condición humana y humanista”, y transformar al Uruguay “no para una élite”, sino para incorporar a todos a ese futuro.
“Si el presente es de cambio permanente, preparémonos, no nos resignemos a la realidad porque, si nos hubiésemos resignado, no tendríamos el Plan Ceibal”, aseveró la precandidata. La estrategia debe incorporar la idea de que el cambio es permanente pero también que no impacta igual a todos y es ahí que subrayó que será nuestra condición humana y humanista la que se pone en juego.
El esfuerzo de adaptación y cambio que deberá transitar el país requiere un cambio de paradigma. “El general Seregni decía que nada ni nadie detiene a un pueblo decidido y consciente, que sabe lo que quiere y que sabe a dónde quiere ir; y lo que quiero compartir con ustedes hoy es que hay un cambio de era, es el Frente Amplio el que tiene que abrir una nueva vida para ese nuevo cambio de era y que pensemos al revés: en vez de resignarnos, saber qué queremos”, propuso.
Por qué la conversación con los jóvenes está errada según Carolina Cosse
“Siento cada vez más que no estamos embocándole a la conversación con los jóvenes porque todo el tiempo los estamos viendo como objetos de enseñanza en vez de como fuente de conocimientos, tenemos una enorme oportunidad de integración”, proclamó Cosse.
El diagnóstico de Cosse en base a datos oficiales indica que la pobreza se infantilizó
Según datos oficiales, prácticamente la población de Fraile Muerto están en situación de calle, unos 3.900 uruguayos. La cantidad de personas en situación de calle en Montevideo duermen a la intemperie y, de ellos, el 40% se alimenta con la solidaridad de los vecinos y el resto en los contenedores.
La infancia está expuesta a la pobreza, la inseguridad alimentaria y la violencia. “Y todo esto el Gobierno lo sabe”, criticó. Hay 25 hogares de cada 1.000 que pasan hambre. “Qué vergüenza, y esto el Gobierno lo sabe”, añadió Cosse. A esto, sumó los dos casos por mes de niños baleados que registra el sistema de salud.
“¿Podemos prepararnos para el futuro con una realidad así?, por supuesto que no; no nos resignemos y preparemos al país con una estrategia colectiva de no dejar a nadie atrás y, en este 26 de marzo, en el año que Uruguay va a definir su futuro, los invito a recordar el 1º de marzo de 2005 cuando se nos propuso construir u npaís donde nacer no fuera un problema, donde ser joven no sea sospechoso y donde envejecer no sea una condena”, finalizó.
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