Lula presidente: “intentaron enterrarme vivo y aquí estoy”

Con un llamado a la paz, el diálogo político y un fuerte mensaje para terminar el hambre y promover políticas de igualdad social, Luis Inázio Lula da Silva dijo en conferencia de prensa que, en esta jornada, no solamente vencieron a un adversario sino a toda una maquinaria estatal. Señaló que la economía debe ser una herramienta para promover a las personas, no para perpetuar la desigualdad.
Lula, con la voz notoriamente afectada, agradeció a los militantes y parlamentarios. Dijo que ellos enfrentaron la maquinaria del Estado brasileño colocada al servicio del candidato oficial, no a un adversario.
Felicitó a sus votantes, porque intentaron enterrarme vivo y hoy estoy aquí para gobernar este país, en una situación muy difícil. Pero tengo fe en dios y con la ayuda del pueblo, este país volverá a vivir democráticamente.
Llegó el final de una de las más importantes elecciones de la historia, con dos proyectos de país. El único vencedor es el pueblo brasileño.
La mayoría del pueblo brasileño ha decidido que haya más libertad, igualdad, fraternidad en el país. El pueblo demostró que quiere más que el derecho a protestar, quiere derechos. El pueblo brasileño quiere vivir bien, un salario justo, libros en ver de armas, bienes culturales porque eso alimenta el alma.
Quiere tener de vuelta la esperanza, esa es la democracia que eligió el pueblo brasileño en las urnas. Es esta la democracia que vamos a construir desde el primer día de gobierno.
La economía debe servir como un instrumento para mejora la vida, pero no para perpetuar la desigualdad, dijo. En su discurso, ofreció su trabajo contra el racismo, la violencia contra las mujeres, el aumento de salario,
“Mis amigos y amigas, a partir del 1º de enero voy a gobernar para 215 millones de brasileños, somos un único país, un único pueblo, una gran nación. No me interesa dividir la familia ni generar discordia, quiero restablecer los lazos de amistad que rompió la propaganda criminal del odio, no quiero vivir en un país dividido, en permanente estado de guerra”.
“Estoy cansado de ver al otro como enemigo”, sintetizó.
El compromiso más urgente es acabar con el hambre, otra vez. Siendo el tercer mayor productor de alimentos, Brasil tiene el deber de garantizar los tres platos diarios para todos.
Además, en el plano internacional, llamó a “conquistar la credibilidad” para que el país “deje de ser un paria” en los espacios internacionales y rememoró la cantidad de organismos internacionales donde participó Brasil, incluido el Mercosur. “No nos interesa que nuestro país quede recluido a un productor de materias primas”, precisó.
Protección a la Amazonia, con cooperación internacional incluida, también fue mencionada por el mandatario electo. Subrayó que desde el 1º de enero trabajará sin descanso “para que el Brasil la verdad sobreponga a la mentira”, “invito a cada brasilero y brasilera, independientemente de su voto, vayamos juntos por el Brasil porque hay más de lo que nos une”, promovió.
