Mauricio Rosencof analiza, con mucho humor y también con cierta indignación, algunos hechos que ocurren en el panorama político uruguayo.
Esas dos sensaciones, esos dos sentimientos los expresa cuando irónicamente se refiere a los "profesionales del cucurucho", aludiendo a los periodistas que hostigan a figuras políticas de la oposición y en cambio no lo hacen con las del oficialismo.
También reclama que la intelectualidad y los artistas de izquierda tomen partido y se expresen abiertamente en favor de un modelo de país, pensando en la segunda vuelta electoral del 24 de noviembre.
No obstante, a pesar de los pesares, su mensaje final es esperanzador y hace un llamado "a redoblar...".