El dato surge de un estudio elaborado por el Departamento de Emergencia Pediátrica del centro de salud, publicación aceptada por la Sociedad Española de Urgencias Pediátricas.
Un estudio del Departamento de Emergencia Pediátrica que encabeza la profesora agregada Mariana Mas, publicación aceptada por la Sociedad Española de Urgencias Pediátricas, advierte que en promedio, cada 15 días la emergencia del Pereira Rossell atiende a un niño o adolescente herido de bala.
La especialista sostuvo, en diálogo con El Observador, que “las balas perdidas que se mencionan” en los titulares de prensa y que impactan en los menores de edad, “son en la mayoría el resultado de una situación de violencia, de un contexto de bandas que se disputan el territorio, de rapiñas, de sicariato”.
Por otro lado, el estudio indica que son más los menores de edad heridos de bala que ingresan a emergencia pediátrica que fueron baleados fuera de su domicilio por motivos de violencia, incluso el promedio de edad bajó de 14 años a 12.
“Antes eran noticias esporádicas, ahora son casos que vemos a cada rato y que ya no son lesiones exclusivas del adulto”, subrayó Mas a El Observador.
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